CREACIÓN
En todo momento, FANTOM satisface la necesidad de crear. Su proceso fluido y ágil no tiene modos confusos, limitaciones técnicas frustrantes ni peajes en la calidad del sonido. El proceso creativo de FANTOM refleja cómo trabajan los músicos modernos, con fluidas herramientas de composición, entornos creativos activables al instante y una profunda integración con el ordenador.
Nada de modos. Solo un proceso impecable.
Cuando te visitan las musas, no puede haber barreras. Con FANTOM, no tienes que renunciar al sonido ni buscar atajos para esquivar limitaciones técnicas desfasadas. Y olvídate de preocuparte por si las características funcionan en un modo determinado. FANTOM siempre está en modo creativo total, y tu proceso se mantiene sin cambios en cualquier situación.
Monta una escena.
Cuando estás listo para crear, FANTOM también. Un toque y al lío. Tus sonidos, patrones y configuraciones de interpretación se organizan en espacios creativos personalizados, que reciben el nombre de escenas. Una escena puede ser una canción entera, una sección o un punto de partida con tus sonidos favoritos dispuestos a tu manera. Las escenas se pueden encadenar y cambiar al instante sin saltos ni interrupciones.
Todo. Siempre.
No tiene sentido que te preocupes por cuántos efectos tienes disponibles o por si podrás usar patches complejos si cambias de sonido. Con FANTOM, puedes centrarte en tocar sin racionar la potencia de procesamiento. Y tienes tanta capacidad que puedes usar las 16 partes con todos los efectos disponibles —simultáneamente— y aún te queda margen para hacer transiciones impecables. Es como tener la potencia de dos FANTOM en uno.